La Asociación Española Contra el Cáncer, la asociación española sin ánimo de lucro contra el cáncer, ha sufrido un cambio de imagen completo. La renovación de la identidad se debió a la importancia de las tareas que resuelve la marca y la necesidad de reflejar los esfuerzos y desarrollos realizados en esta dirección. Siendo el cáncer ya la enfermedad del siglo, con más de 280.000 casos sólo en España, cobra especial relevancia la actuación para combatirlo. La marca lleva más de 70 años luchando contra esta grave enfermedad, liderando este rumbo en su país y siendo uno de los líderes en todo el mundo. Pero la modernidad requería ajustes en la identidad corporativa propia y en la identidad externa, que fueron desarrollados por el equipo profesional del estudio de diseño Saffron.
La nueva visualización permitió conformar una marca que brinda comunicación de alta calidad con la enorme audiencia que es parte interesada en el éxito de los desarrollos de la empresa. La marca actualizada ha logrado preservar los valores fundamentales que se han desarrollado durante los largos años de existencia, habiéndolos modernizado a la luz de los requisitos de la nueva realidad. En primer lugar, esto afectó al logotipo y al nombre, que, por su extensión y falta de exhaustividad de la información, provocó problemas de identificación. El rechazo de la abreviatura permitió enfatizar la esencia de las actividades de la empresa. El módulo de texto Contra el Cáncer, que se distingue por la dinámica y el coraje de ejecución, refleja la posición real de la Asociación – la lucha por la protección de los derechos de los pacientes, buscando cambiar la realidad existente con esta enfermedad.
La identidad se basa en una línea común, que simboliza la unidad de relaciones en la lucha contra el cáncer para todas las partes posibles: pacientes y sus familias, investigadores y voluntarios. De esta forma, se transmitió información importante sobre el reconocimiento de la singularidad de la percepción por parte de diferentes personas y grupos de las actividades de la empresa. Refleja todo lo personal, lleno de altibajos, momentos de optimismo y decepción, con toda su flexibilidad, lo que le da a la visualización el efecto de un elemento vivo.
El tono de voz creado coloca a la propia enfermedad en el centro de la identidad, que se convierte en la base de todas las “charlas”. Sencillo y emotivo, está orientado a la acción y se distingue por su optimismo, profesionalidad y versatilidad. La fuente Raleway elegida para el bloque de texto transmite el mensaje requerido clara y claramente. La paleta de colores corporativos es brillante, enérgica y optimista. Está totalmente adaptado para su uso en entornos tipográficos y digitales modernos. Una adición importante fue el uso de fotografías que ayudaron a mostrar la enfermedad con naturalidad, agregando naturalidad y honestidad al estilo.