Desde 1902, España ha sido sede del partido más grande del mundo, El Clásico, cuando el mundo del fútbol deja de esperar al ganador: Barcelona o Real Madrid. Este año tendrá lugar la 247ª edición oficial, bajo la cual La Liga ha preparado un completo rebranding, desarrollado por el Barcelona Vasava. En la historia del fútbol mundial, este partido es el enfrentamiento más estable entre equipos. La rivalidad no solo se alimenta de los deportes. Estas dos importantes y antiguas ciudades del país representan las dos Españas, que se diferencian en estilo de vida, opiniones políticas, cultura e historia. Hoy, El Clásico ha crecido mucho más allá de la máxima división de fútbol profesional. El término ahora incluye todos los partidos entre clubes en diferentes campeonatos. Cada juego atrae 5 veces más espectadores que el Super Bowl.
El proyecto de marca adoptado refleja la esencia del evento, su «ADN» histórico, que simboliza rivalidad y fuerza, pasión y tecnología, innovación y dinamismo, productividad y globalidad, escala. Como líder en entretenimiento e innovación, La Liga hace de su nueva imagen un activo adicional que agregará valor no solo a la marca, sino también a la propia competencia y sus clubes. La identidad visual creada refleja el presente y el futuro, unidos por sus historias.
El diseño del logotipo se inspiró en las emociones que caracterizan tanto a los jugadores como a los aficionados. La visualización une a todos los que participan en este evento deportivo, independientemente del lado en el que se encuentren, permitiendo que todos, sin excepción, se sientan como un elemento importante del juego. Los gráficos del logotipo destacan por su energía, que se transmite por las esquinas afiladas y la estricta verticalidad de las letras que lo componen. La presencia de dinámica y movimiento, así como la demostración de la base digital de la construcción del nombre, añaden espectacularidad a la percepción visual de toda la composición.
El logotipo utilizó la fuente Halunke, que fue especialmente diseñada por Elena Schneider. El estudio ha reelaborado la letra central «A», haciéndola acentuada y armoniosa con todas las letras del nombre. Al mismo tiempo, la «i» mayúscula marca el ritmo más conveniente para percibir la composición de la palabra completa. El color dorado verdoso que prevalece en la paleta es la encarnación de la tradición y una demostración de la nobleza de ambos oponentes históricos. La riqueza del naranja le da al emblema energía y alerta.
Este monograma se convertirá en un letrero que sustituirá en todas partes al texto «vs», previamente colocado entre los nombres de los equipos, separándolos. Ahora habrá ElClasico en letra pequeña en minúsculas. El nuevo cartel combina elementos de heráldica con las tendencias minimalistas de nuestro tiempo. Simboliza fuerza, rivalidad, oposición. La cresta consta de varias flechas superpuestas, cuyas puntas se dirigen en diferentes direcciones. Esto proporciona una idea de la tensión y la fuerza de la rivalidad.