En 1981, se inició una empresa de ensamblaje de bicicletas en Saint-Georges, Quebec. La marca obtuvo su nombre en honor a la cadena montañosa que se extiende desde la Columbia Británica hasta la parte suroeste de los Estados Unidos. La marca comenzó en West Point Cycles, donde se convirtieron las bicicletas de carretera Nishiki. La empresa se desarrolló bastante rápido. Después de 3 años, fue más allá de Vancouver, suministrando sus productos al mercado internacional. La adquisición del Grupo Procycle en 1997 le permitió ampliar significativamente la gama, aumentando los volúmenes de producción. A día de hoy, la marca fabrica bicicletas de montaña y de carretera, y ofrece una decena de modelos diferentes para cada uno de estos colectivos. Al mismo tiempo, la compañía patrocina a varios ciclistas: Wade Simmons, Thomas Vanderham, Carson Storch y Vaea Verbeeck, y equipos deportivos, incluido el mundialmente famoso Rocky Mountain Race Face Enduro Team. Continuando con su desarrollo, la marca recurrió a diseñadores profesionales para crear una nueva apariencia, cuya tarea es crear una visualización que cumpla con los requisitos modernos y ayude de manera efectiva a alcanzar nuevas alturas.
El nuevo emblema es radicalmente diferente a la última versión. Se basa en el reflejo textual del nombre de la marca, realizado en letra grande y clara en color blanco, lo que asegura su fácil lectura en cualquier formato y tamaño. El uso de un color corporativo azul oscuro como fondo, en el que se realizan todos los espacios negativos del logotipo, resalta favorablemente la inscripción, convirtiéndola en un elemento de acento del letrero principal.
El logotipo en sí está hecho en forma de rombo regular, cuya parte superior está formada por una imagen estilizada de montañas, que son el símbolo principal de la región. Se fabrican con los colores principal y amarillo, que también se utilizan para crear la imagen de abetos sobre un fondo amarillo en la parte inferior del emblema. El nombre de la marca se coloca en el centro del rombo, su abreviatura de 4 letras. Su borde inferior, como original solución, repite la curva de la placa, atrayendo la atención del espectador, centrándolo en el propio nombre.
El uso de tecnologías modernas en la creación del logotipo aseguró su visualización de alta calidad, claridad y legibilidad visual en formatos impresos y digitales. El nuevo estilo y diseño gráfico permitió obtener un nuevo rótulo que puede funcionar por mucho tiempo, sin necesidad de rediseñarlo en un futuro cercano.