2018 vio el comienzo de una nueva era para Zagat, el boletín digital de restaurantes mejor calificado. Como nuevo sitio web, ha adquirido una forma, una imagen externa y una identidad diferente. Una nueva identidad para uno, aunque solo para Miami, una nueva identidad fue desarrollada por el estudio de Brooklyn, Franklyn, con sede en Nueva York. Desde 1979, cuando se puso en marcha la empresa familiar para formar valoraciones y reseñas de restaurantes, que fueron creadas por los propios visitantes, todo empezó también desde una misma ciudad. Poco a poco, la revista cubrió más de 70 ciudades. Además, las calificaciones no fueron solo en el campo de los restaurantes. Las calificaciones se expandieron a hoteles y clubes nocturnos, tiendas y zoológicos, películas y teatros, golf y campos, aerolíneas y música. Sin embargo, revender el negocio de Google en 2011 fue una decisión equivocada. El pulpo no pudo hacer frente a la gran cantidad de tentáculos. Habiendo dejado de imprimir la revista impresa Google en 2017, comenzó a vender Zagat. Y ya en 2018, el próximo propietario, The Infatuation, lanzó la revista en una nueva forma digital.
Se recuperó la idea de «voz comunitaria». El contenido de crowdsourcing personalizado, las reseñas que dan los propios visitantes en 30 puntos, se están convirtiendo nuevamente en las direcciones principales. La nueva aplicación se está desarrollando para Miami en 2021. Franklyn creó una identidad visual para formar la fase inicial del mayor legado que quedó después de la venta de la marca. El nombre se hizo eco muy favorablemente en la fuente Neue Haas Grotesk con la versión de 2015, al mismo tiempo se percibe mejor visualmente y se recuerda bien. Sin embargo, al hacer un gesto hacia la vieja generación, que recuerda el logo de la marca, el nuevo emblema pierde entre la nueva generación. Al poseer un mayor despilfarro, se ve de manera diferente en la comprensión de las calificaciones, completándolas.
En la nueva forma de su tipografía, la marca confía en el Neue Haas Grotesk, que está «sintonizado» con la historia interrumpida de la marca, conjuntos adicionales de tipos de letra. Para el soporte se eligió el modernismo clásico de los años 70, caracterizado por la flexibilidad y un sistema de rejilla. Era muy importante aplicar una gran cantidad de tono granate. Además, se han agregado tonos rojos brillantes y claros, así como una fuente blanca sobre un fondo rojo, lo que los hace especialmente contrastantes y únicos, memorables y legibles. Esta paleta llama la atención, pero abre nuevos horizontes y oportunidades en la formación de una nueva identidad.