El sabor del whisky escocés Crown Royal ha recibido muchos premios. Esta bebida alcohólica única está hecha de granos cultivados en la provincia canadiense de Manitoba. Se envejece en barricas de roble en los almacenes de la destilería, que ocupa una vasta área cerca del lago Winnipeg. El fabricante cumple con estrictos estándares para que el whisky moderno sea de la misma calidad que el primer lote que se convirtió en regalo para los monarcas ingleses.
Significado e historia
La aparición de la marca Crown Royal estuvo precedida por eventos asombrosos asociados con la gira real. Hasta donde se sabe, el rey Jorge VI y su esposa fueron los primeros miembros de la realeza británica en viajar a Canadá. Uno de los empresarios locales apreció su aventurerismo y decidió darles a los monarcas un valioso regalo: whisky de mezcla elaborado por ellos mismos. Ya tenía experiencia en la elaboración de licores, pero el empresario quería crear algo único, por lo que probó cientos de mezclas con diferentes proporciones de ingredientes. El alcohol resultante se vertió en decantadores de cristal, que llenaron diez cajas.
Fue esta receta la que se convirtió en la base del whisky Crown Royal, cuando la fama de la bebida real llegó tan lejos que el empresario tuvo que ponerla en producción en masa. El primer lote entró en las tiendas en la década de 1960. El producto era reconocible por el distintivo logotipo de la corona en el cojín y las sutiles letras en cursiva. El diseño ha sido diseñado para que coincida con la forma elegante de la botella.
en la década de 2000 la marca fue rediseñada por el artista gráfico Chris Mitchell, que dirigía su propio estudio, Epic Icons. Redibujó la corona, haciéndola más colorida y agregando un efecto tridimensional a través de una combinación de varios tonos de oro, rojo y púrpura. Este logotipo se sigue utilizando hasta el día de hoy, y recuerda el glorioso pasado de Crown Royal.
El principal símbolo visual del whisky es la corona sobre la almohada. Estos elementos reflejan la herencia de la marca, que fue creada originalmente para el Rey y la Reina de Gran Bretaña. Se ven lujosos para combinar con el alto estatus de la realeza. La corona tiene un marco de oro adornado con piedras preciosas. La almohada tampoco es simple: está decorada con bordados dorados y borlas.
Chris Mitchell ha conseguido transformar una simple insignia ilustrativa en un símbolo de lujo utilizando las herramientas gráficas más sencillas. Cambió ligeramente los colores y la forma del emblema, dándole un aspecto verdaderamente real.
Fuente y colores del símbolo
La inscripción «Crown Royal» es un elemento de logotipo tan importante como la imagen. Está escrito en cursiva, estilizado como un texto escrito a mano. Se puede encontrar una fuente similar en la familia Kuenstler Script, que apareció por primera vez en 1902. Este es un tipo de caligrafía redonda con trazos contrastantes. Pero el Crown Royal tiene letras más audaces, lo que se hizo para una mejor legibilidad.
La paleta de colores contiene rojo, dorado y magenta. Esta combinación recuerda a los colores de un paquete de regalo de whisky destinado a los monarcas. Hasta donde se sabe, el empresario colocaba las garrafas en bolsitas individuales de color púrpura con bordados dorados. Y se añadió rojo para enfatizar el origen noble de la bebida.